HOUSE IS IN DA HOUSE
Posted septiembre 24, 2009
on:- In: crítica TV
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Con más cursilería, hip hop y cajitas de música de lo habitual, House estrenó esta semana en Estados Unidos su sexta temporada con gran éxito. En un capítulo doble especial, recogimos al doctor donde lo dejamos tras el hipercomentado final de la temporada pasada: el hospital psiquiátrico de Mayfield. Y para los espectadores fieles que lo seguíamos cada martes en Cuatro y que habíamos aguantado con paciencia y resignación su cinismo de primera clase y su caracter misántropo y obsesivo, la sexta temporada comienza con un House que no parece House. Aunque en realidad todo es un engaño, porque House sigue siendo el mismo pero distinto. Trae las viejas señales, pero sus manos son las de ahora. En hora y media, los personajes episódicos se nos meten en la cabeza con la facilidad con la que siempre lo hacen en esta serie. Y vemos a un Gregory House que pasa de pez fuera del agua a la aceptación total de sus problemas y a pronunciar las palabras que le permitirán empezar a ver la luz («I wanna get better»). Un cambio de 360º que en mi opinión, debería ser el final de esta magníficamente entretenida serie. Sin embargo, queda toda un temporada por delante y se la han jugado a una sola carta. A partir de aquí, o House vuelve a ser el de siempre o vemos a este personaje estrella afrontar su realidad desde otro ángulo. Habrá que esperar a los siguientes capítulos para ver si el giro magistral deriva o no en una metedura de pata.
septiembre 25, 2009 a 11:09 am
Yo también estoy en modo Ein? sobre todo porque en la terapia no aprovecharon la subtrama del asunto del padre de House, pero en fin, confío en los guionistas.